lunes, 16 de diciembre de 2013

Warhammer: Ira y Rabia

 El Príncipe Demonio continuó golpeando a su enemigo mucho tiempo después de que este hubiera muerto. Poco a poco, el rojo de la ira que inundaba su existencia fue retirándose, permitiéndole entender que la batalla había acabado. Aquellos débiles seres apenas habían presentado batalla dejando muy poco que ofrecer a Khorne. Algunos Juggernauts continuaban abalanzándose sobre cualquier cosa que se moviera, bramando una mezcla de grito de animal salvaje y chirrido de máquina endemoniada. La mezcla de carne y metal les convertían en una trituradora de enemigos imparable, para regocijo de los Desangradores que, más que dirigirlos, los acompañaban en su camino de destrucción.

Los Desangradores por su parte, empezaron a reagruparse, sus largas lenguas viperinas saboreando el aroma de la masacre y buscando un nuevo combate.  Sus gigantescas y retorcidas espadas no podían permanecer mucho tiempo inactivas. Los propios Desangradores raramente dejaban de moverse, sus músculos contrayéndose espasmódicamente en busca de acción y más cráneos para el Dios de la Sangre. El Príncipe Demonio había visto pocas veces al Poder Oscuro, pero su presencia se podía sentir en sus representantes en el mundo mortal. La mera existencia de los Devoradores de Almas generaba a su alrededor un ansia de combate y lucha cuya personificación divina era  el propio Khorne. En esta batalla, solo uno de esos seres se presentó, desapareciendo en breve en busca de mejores campos de lucha…¿o no fue eso?... el Principe Demonio apenas podía recordar con detalle el combate, por debajo de la furia roja que todo lo cubría. Sin embargo, tenía la sensación de que el Devorador de Almas se había marchado “enojado”. Pero cómo sería posible que la propia esencia de la ira pudiera enojarse más…

El Príncipe Demonio dejo a un lado sus pensamientos, que generalmente solo le generaban dolor de cabeza y, como solía hacer desde tiempos en que aún conservaba su humanidad, rememoró la batalla, volviendo a disfrutar de los momentos más violentos y sanguinarios de la misma. Afortunadamente, en esta ocasión, ninguno de los Hermanos de su Señor decidió personarse en el combate. Aunque con el tramposo Tzeetch nunca se podía estar seguro. 

El Demonio odiaba absolutamente todas las ilusiones que cambiaban la realidad para vencer al enemigo. Incluso cuando era humano, no encontraba mayor satisfacción que partir el cuello a los adoradores de Señor de las Mentiras antes de que empezaran con sus malditos sortilegios. Siempre atacando de lejos o volando por encima de la batalla en los malditos discos. Formas siempre cambiantes que siempre procuraban evitar ensuciarse las manos en la lucha. Si los demás se mataban entre ellos gracias a sus intrigas y conspiraciones, los mutables demonios se sentían satisfechos y lo expresaban con sus chirriantes risas.

Poco placer encontraba el Príncipe Demonio en aplastar Aulladores o Incineradores, cuyas cabezas eran difícilmente localizables y sus cráneos, por lo general, inexistentes. Como mucho, de vez en cuando, se divertía aplastando a los insoportables Horrores. Si tenía suerte, al destrozar uno aparecían dos, con lo que el entretenimiento duraba un poco más…

Los otros dos Hermanos de su Señor siempre le habían caído mejor dentro del odio mutuo profesado. Aunque la mayoría de los demonios de Khorne se burlaban de los gráciles siervos de Slaanesh, para el Príncipe Demonio no cabía duda de que siempre ofrecían una buena pelea, pues aunque se rompían con el primer golpe, este no era sencillo de dar. Todos los seguidores del Señor del Placer se movían con una velocidad que los hacía casi invisibles a la vista. Afortunadamente para el Demonio, la vista no era más que uno de sus sentidos, y no necesariamente el mejor. Los seguidores de Khorne viven para la lucha y luchan mientras viven, por lo que sus reflejos están tan avanzados que casi se adelantan a la propia acción.

El Demonio recordaba la expresión de sorpresa de una diablilla cuando su salto se vio interrumpido por un hacha que estaba allí, antes incluso de que ella hubiera pensado en saltar. Sin embargo, los Rastrealmas podían ser aún más rápidos. Esos malditos y serpentinos demonios parecían moverse a través del mismo tiempo. Y podían arrastrar una picadora de carne, como solían ser los carros de Slaanesh.  Siempre le gustaban estos combates. Aunque al final acababa con un ataque de ira por dejarse llevar por  ese placer pues, ¿no es Slaanesh el Señor de las Tentaciones?

Sin embargo, los seguidores de Nurgle no tenían ese problema. Eran luchadores lentos y pesados. Y resistentes, lo que alargaba los combates y permitía que los niveles de rabia e ira alcanzasen su máximo potencial, para satisfacción de su señor Khorne. Sin embargo, los combates no tenían ningún desafío. Tanto la parte humana como la demoniaca del Príncipe Demonio seguía deseando el combate con un rival que representase un desafío y a veces no disfrutaba tanto de la masacre sin más, por mucho que los descompuestos cuerpos de los demonios de Papá Nurgle se regeneraran y siguieran luchando aún estando prácticamente cortados en pedazos. Ni siquiera sus extrañas monturas, esas gordas y purulentas monstruosidades con forma de moscas incapaces casi de elevarse sobre el suelo y moviéndose lentamente por el campo de batalla representaban ningún desafío.

El Príncipe Demonio regresó al Espacio Disforme para retomar fuerzas, pero no conseguía quitarse la sensación de que algo iba mal. Cuando era humano seguro que habría sido capaz de identificar que fallaba, sin embargo, desde su Transformación, la mayor parte del tiempo sus pensamientos eran solo furia roja e incontrolada. De hecho, era quizás lo que más le gustaba. El olvido de todas las preocupaciones. El ardor de la batalla. El peso del hacha en la mano y la victoria sobre los enemigos. Verles la cara. Parar sus golpes con tu escudo y destrozarlos con tus propias garras. Sí. Eso era. No atacar de frente. El maldito cañón de cráneos. ¿Cómo podían tener esa máquina con ellos?.  ¿Qué presente hay para Khorne en un enemigo vencido a distancia?. ¿Cómo llegó ese cañón demoniaco a ellos?. El Príncipe Demonio maldijo su parte humana que se hacía tantas preguntas. Que hacía que le doliera la cabeza. Que pareciera un maldito seguidor de Tzeetch, con sus conjuraras, pensamientos paralelos, ilusiones, hechizos y sus regalos envenenados. Su placer por las muertes lejanas y por hacer traicionar sus más profundas convicciones a todos los seres…. El brillo de comprensión se extinguió de los ojos del Príncipe Demonio tan pronto como surgió mientras la ira lo cubría todo de un manto rojo… un gruñido escapó de sus labios…”Tzeetch…”  

domingo, 1 de diciembre de 2013

Warhammer: Del Infierno del Caos...

(Post original 6/9/2010)

"... concluyo con esto mi breve análisis sobre los fundamentos del mal llamado Reino del Caos y de los cuatro Poderes del Caos. Me reafirmo en mi creencia que, lejos de esos entes destructivos que todo el mundo apreceia en ellos, no son más que las fuerzas impulsoras de este Universo, como lo son los ríos la lluvia o el viento o la propia Naturaleza."

"Pues, ¿qué es si no, el aspecto asociado a Nurgle?. Estamos hablando de la enfermedad y la descomposición. ¿Y hay algo más natural que eso?. La descomposición está detrás de muchos bienes, incluso de alimentos y bebidas. De la levadura y la cerveza. Y, evidentemente, limpia los campos de los animales, plantas y personas que han fallecido. ¿Dónde se acumularían los cadaveres sin descomposición?. ¿Es que algo ha de ser malo, simplemente por ser feo?. Y las enfermedades, ¿no nos han permitido desechar el ganado débil del fuerte?. Cierto es que nos transmiten a veces dolor y sufrimiento. Pero si sobrevivimos, estaremos fortalecidos en cuerpo y mente."

"Y precisamente en frente nos encontramos con Khorne. Otro aspecto mal comprendido por mentes cerradas. El aspecto de la fuerza vital, de la resistencia a lo establecido, de lo que nos hace más fuerte. ¿Es acaso algo tan temible?,¿tan demoníaco?. ¿No es lo que nos permite sobrevivir y no sucumbir a la muerte?. Incluso hablamos de la Ira Justa, de la Ira Divina. Se critica a Khorne por su ansia de sangre, su sed de muerte. No creo que sea cierto tal. Khorne es la representación del deseo de ser más poderoso que los demás, en el aspecto físico. Y en la lucha por ser más fuerte, más rápido, más resistente, hay y habrá siempre bajas. Pero no como objetivo, sino como daño colateral."

"¿Y para qué querríamos seguir vivos si la vida no fuera placentera?. Sin la búsqueda del placer, sin Slaanesh, no habría razón para estar vivo. No habría razón para ser. La busqueda del placer es el motor de la vida. Cierto es que se critica a Slaanesh de la busqueda del placer de una manera irracional, en pozos prohibidos y aberrantes. ¿Pero quien decide que es un placer prohibido?. ¿Quien decide que es lo normal y lo antinatural?. Las modas cambian. Lo prohibido es aceptado. Lo que queda es el placer. "

"Y finalmente, qué decir de Tzeenth...de la búsqueda del conocimiento. De la comprensión del todo. De la sabiduría. De lo que hace evolucionar la vida. Qué bien más ideal. Qué objetivo más sublime para cualquier estudioso como yo... Desde mi punto de vista, la busqueda del conocimiento que representa Tzeenth engloba a todos los otras aspectos del Caos. ¿O la enfermedad no crea la busqueda de sus causas y sus soluciones?. ¿O a caso la busqueda de la perfección guerrera no implica el estudio del arte marcial y el desarrollo de las armas?. Y la busqueda del placer... ¿no es acaso la busqueda del conocimiento del funcionamiento de uno mismo?...Quien busque cualquier cosa que no conozca ya, tiene a Tzeenth con él. "


"Los ignorantes critican estas fuerzas sin conocerlas. ¿Es mala la lluvia porque me mojó al salir de casa?¿Es malvado el mar porque los barcos se hunden en él?. Ah, no, los mal llamados poderes del Caos son como las fuerzas de la Naturaleza, más allá del bien y del mal. ¿Que los demonios tienen voluntad?. La misma que el viento. ¿Y los Grandes Poderes?. ¿Acaso estas manifestaciones no son individuos propios?. ¿No hablan y se comunican con los mortales?. Sí, pueden tener voluntad. Nurgle, Khorne, Slaanesh y Tzeenth...La personifiacción de estas fuerzas. Los Dioses del Caos. Sí, como todos los Dioses, han de tener Voluntad, Poder, Conocimiento. Pero más allás del conocimiento humano. Más allá de todo conocimiento. Tan lejos, que solo Tzeenth pueda quizás comprender a sus Hermanos."

"Pero, ¿malicia?. ¿Deseo de jugar con los humanos, sus creencias y voluntades?. Tonterías. ¿Que disfrutan con el dolor y el sufrimiento de la Creación?. Paparruchas. ¿Historias de torturas, maldiciones y atrocidades contra aquellos que se acercaron demasiado?. Supercherías, mitos, creencias de incultos. Y yo, Martíricus, lo demostraré esta misma noche, cuando los Poderes acepten mi llamada y este humilde estudioso les diga que empieza a comprenderlos. Ya están aquí. Ya escucho sus pasos. ..Y sus risas..."

Pergamino encontrado entre los tentáculos de una masa infome y babeante de carne, enjendro el cual se cree que fue el Prof. Martiricus...

jueves, 14 de noviembre de 2013

Warhammer: Los Demonios de Javio'lo'n

El quinto ejercito que presento acaba de ser actualizado recientemente, cuando sacaron algunas miniaturas coincidiendo con el estreno de la última edición, aunque muchas de las miniaturas estaban pintadas desde hace tiempo.

ACTUALIZADO (2013): Con la Octava, nuevas aberraciones se incorporaron a los Demonios. Algunas incluso demasiado aberrantes hasta para el Caos (ese cañón para Khorne...)

Desde el espacio disforme llegan:

Los Demonios de Javio'lo'n
Las Hordas Demoniacas de Javio'lo'n
 Aplastador de almas


10 Arpías y Galrauch


4 Engendros del Caos

2 Principes Demonios y Be'Lakor

Kairos Tejedestinos, Gran Inmundicia, Guardián de los Secretos, Señor de la Transformación y Devorador de Almas


SLAANESH

Demonios del Señor del Placer y el Dolor

26 Diablillas de Slaanesh y La Mascara

10 Rastreaalmas

3 Diablos de Slaanesh


 Glorioso Carro de la Demencia y Desollador Infernal

TZEENTCH


Demonios de Señor del Cambio y el Engaño

26 Demonios Rosa, 2 Incineradores y El Cambiante



5 Aulladores de Tzeentch, Escribas Azules, Heraldo en Disco y a pie




Heraldo  y Glorioso Incinerador en Carro de Tzeentch

NURGLE


Demonios del Señor de la Descomposición



9Enjambres de Nurgletes y Heraldo

21 Portadores de Plaga y Epidemius


3 Zánganos de la Plaga

KHORNE


Demonios del Señor de la Sangre


25 Desangradores y Despojacraneos

10 Mastines de Khorne y Karanak

6 Desangradores en Aplastador

 Trono de Sangre y Cañón de Craneos

En total: 131 Demonios, 11 Mastines, 6 Aplastadores, 16 Reastreaalmas, 10 Arpías, 9 Enjambres, 4 Engendros, 3 Príncipes Demonio, 9 Heraldos, 9 Aulladores, 5 Grandes Demonios, 3 Zánganos, 6 Carros, 2 Discos de Tzeentch, 1 Aplastador de Almas.

martes, 15 de octubre de 2013

Bloodbowl: Los Diplodocus de Tixal

Gracias a los crowdfunding de Meiko o de Willy-Miniatures, el balón ha vuelto a rodar o a volar o a dejarse directamente a un lado mientras los jugadores se apalizan de lo lindo en los campos de BloodBowl de este servidor... Comencemos dando la bienvenida a 

LOS TIXAL DIPLODOCUS



ESLIZONES
Mik, Nik, Tik, Lik y Pik, buscando las bandas y evitando a los defensores rivales



SAURIOS

Krak, Krok, Krek, Kruk y Krik, abriendo huecos a dentelladas para sus compañeros



KROXIGOR "COCODRILO" GAXAIL

Un muro infranqueable y con mordiente



ESTRELLAS DEL EQUIPO

SAURIO "SILLY" BILLY
Una roca inamovible




ESLIZÓN HEMLOCKED TA'CHAN
Un puñal en la defensa contraria




CUADRO TÉCNICO

Entrenador SLANN "SAPETE" KROOK
Milenios de sabiduria y partidos al servicio del equipo




Médico CAMALEÓN "VISTAFINA" SLIFP
"Reparando" jugadores mientras sigue pendiente del partido




Animadoras, "SONRISAS" GEIL y "MIRADAS" SOLP
Dando color (verde) en las gradas




Camareras, "OJITOS" PLOS Y "RISAS" LIEG
Refrescando la vida de nuestros chicos